Las Casas Colgadas de Cuenca son una de esas reliquias arquitectónicas de Castilla-La Mancha y todo un icono para el turismo de la ciudad de Cuenca, conocido por el mundo entero y ante las cuales nadie se resiste a llevarse una foto para el recuerdo.

Sus balcones de madera, colgados en la roca sobre el Río Huecar, con vistas al impresionante Puente de San Pablo y el Parador de Cuenca, e integradas en la majestuosa Hoz del Huécar, son uno de los puntos de especial interés turístico para todo aquel que viene a conocer la capital, que además recuperará en breve su condición de restaurante ampliando la oferta gastronómica de la capital de nuevo.

Si bien su origen es desconocido y nos remontamos al siglo XV, donde se habla de un origen medieval en unos casos y musulmán en otros, sí podemos hablar de su futuro más inmediato. Tras una exhaustiva rehabilitación, Cuenca no podía perder un espacio gastronómico como durante muchos años tuvo, y ya está muy cerca el momento de volverlo a recuperar y poder volver a disfrutar de él.

Se ha trabajado muy duro para devolver a Las Casas Colgadas su reconocimiento como restaurante y que devuelva a Cuenca ese reclamo gastronómico por el que el turista apuesta y añada un motivo más por venir a conocer nuestra preciosa Ciudad.

Ya falta muy poco para poder volver a escuchar...
¡He comido en Las Casas Colgadas de Cuenca!

Un nuevo restaurante con una mayor superficie que el antiguo Mesón, dotado de una capacidad para 120 comensales y cuatro salones: la Sala Negra, el Comedor del Rey, la Caja Pétrea y la Sala Blanca. Un espacio más funcional, accesible y comprometido con el medio ambiente por su eficiencia energética. Unas vistas tanto a la plaza de Ronda como a la propia Hoz, y la sensación para los comensales afortunados en comer en sus balcones integrados en el comedor, de volar sobre Cuenca disfrutando de una gastronomía a la altura, nunca mejor dicho, y son algunas de las novedades que próximamente tendremos con nosotros.

Ahora falta conocer la gestión definitiva, en el que nombres como Jesús Segura en Trivio (Cuenca), o el Chef Pepe Rodríguez en El Bohío (Illescas) y ambos con estrella Michelín, ecabezan las dos propuestas que aspiran a la gestión, este último junto a Maripaz Marlo y Nacho Villanueva, dos reconocidos chefs de Cuenca. Ambos proyectos encabezan las dos propuestas que esperan el fallo definitivo que dé el pistoletazo de salida a un restaurante que sin duda dará mucho que hablar en Cuenca, España y el mundo entero.